Arquitectura Mesopotámica
Los materiales más utilizados son la arcilla y el ladrillo, frente a la piedra y a la madera, que casi no se utilizan.
El templo desde un principio fue la construcción sobresaliente.
La finalidad del templo fue de distinto tipo: veneración, rezo, administrativa, mercantil, etc.
Se identifica con el zigurat o ziqqurratu, pero no hay que confundirlo ya que éste es sólo una parte del templo.
Reconstitución del zigurat de Ur. Ladrillo cocido; 21,33 m de altura Santuario consagrado al dios Nannar:
1ª plataforma
2ª plataforma
3ª plataforma
Triple escalinata de acceso
Conocen el arco y la bóveda, que van a ser la forma más utilizada, especialmente en los edificios más nobles; sin embargo, las casas estarían adinteladas.
La aparición del ARCO Y LA BÓVEDA en Mesopotamia fue trascendental para el desarrollo de la arquitectura.
Arquitectura Egipcia
El arte egipcio es definido por los deseos de los faraones de construir obras eternas y pasar a la posteridad.
Es la razón por la que utilizaron piedra para levantar los edificios más significativos.
Es horizontal, igual que el paisaje de Egipto; arquitrabada, (aunque conocían la bóveda y el arco), no lo utilizaron.
Realizada en piedra que daba una gran consistencia a los edificios, que ha llegado hasta nuestros días.
La columna es el elemento sustentante (soporte) básico del templo egipcio.
Los mejores exponentes de arquitectura adintelada en piedra son los edificios monumentales del Antiguo Egipto.
Ejemplo de dintel, en el templo del valle de Kefrén
El templo es un conjunto desmesurado, concebido como símbolo del poder.
La Mastaba es el tipo de sepulcro más antiguo de Egipto.
Allí se enterraban los faraones de las primeras dinastías.
Tenían forma de pirámide truncada con un pozo (a) excavado, en el fondo del cual estaba la cámara sepulcral (b).
Al nivel del suelo hay una capilla y un pequeño compartimento, el serdab (c), con la estatua del muerto.
Los templos del antiguo Egipto solían tener una avenida de esfinges de piedra que conducía a la entrada de los mismos.
Esfinge que custodia la pirámide de Kefrén
El hipogeo es una construcción funeraria excavada en la falda de una montaña.
Las pirámides fueron eje de grandes complejos de piedra que integraban también el vecino templo funerario, un templo en el valle y la calzada que los unía.
Las tumbas de los faraones tienen forma de pirámide porque representan a un rayo de sol petrificado, de ahí la forma triangular de sus caras.
Arquitectura en Creta
Otra cultura urbana importante fue la cretense o minoica.
Se desarrolló en la isla de Creta a lo largo del segundo milenio a.c. y durante la primera mitad del primero.
A continuación podemos ver la Reconstrucción del palacio de Cnossos.
Está caracterizada por los palacios, de los que conocemos un buen número, siendo los más importantes los de Cnosós, Faistós, Hagia Triada y Malia.
Existen una serie de características comunes como su situación sobre una colina; su orientación norte-sur; el patio central en torno al que se disponen las habitaciones unidas por corredores y escaleras; la división del espacio en áreas especializadas con una zona administrativa, las dependencias residenciales y los almacenes; la existencia de dos pisos, al menos; el pavimentado de los suelos; o la estructura de drenaje para retretes y baños.
Arquitectura Romana
La expansión del Imperio romano a lugares donde no se conocía la vida urbana obligó a la creación de ciudades de nueva planta, lo que potenció el desarrollo de una teoría y una práctica urbanísticas complejas.
La planta de una ciudad romana tiene, normalmente, una forma rectangular.
Toda la superficie está dividida por calles dispuestas de manera paralela y equidistantes, formando una especie de tablero de ajedrez.
Las dos calles principales son: el cardo (c), que va de norte a sur; i el decumanus (f), que va de este a oeste.
En el cruce de las dos calles encontramos el foro (d). La ciudad romana incluye los servicios públicos necesarios: abastecimiento de agua (acueducto [h] y depósitos [i]), mercado (e), además de centros de recreo (teatro [b], anfiteatro [a] y termas [g]).
Toda la ciudad está rodeada por murallas, con torres (j) defensivas y cuatro puertas (k) de acceso al interior.
Los romanos construían una amplia red de alcantarillado que recorría la ciudad siguiendo su trazado.
La característica más destacada de la arquitectura románica es la solidez y la monumentalidad y sus elementos distintivos son el arco de medio punto y su desarrollo, la bóveda de cañón.
Ahora vamos a ver la progresión en la construcción de un templo Romano.
El Coliseo de Roma lo hizo comenzar Vespasiano inauguró su hijo Tito el año 80 d. C. Es de su época el cuarto piso, que desentona ligeramente, pero se tuvo que construir para aumentar el aforo y para aguantar los enormes palos en que se sujetaba la vela de lona que, ocasionalmente, podía cubrir la gradería.
En el Coliseo se alcanza un espléndido y magistral equilibrio entre rectas y curvas, muros y bóvedas.
La superposición de órdenes (dórico, jónico, corintio) utilizada en los tres cuerpos inferiores fue el esquema usual que hizo fortuna, no solamente en la antigüedad, sino también en el Renacimiento y el Barroco.
La mayoría de los romanos vivían en pisos de alquiler situados en bloques de 4 ó 5 plantas, llamados insulae. El material más utilizado en la construcción era la madera, por lo que casi no se conservan restos.
Arquitectura Bizantina
El Imperio bizantino se desarrolla desde la época de Justiniano (siglo VI d.C.) hasta su caída en 1453.
Se valora más es interior de los edificios que el exterior; por esta razón los decoran profusamente con mosaicos.
Lo más característico de la arquitectura bizantina es el empleo de la cúpula que es la cubierta que surge de la proyección imaginaria de un arco que sigue un movimiento de rotación sobre él mismo.
Para entendernos mejor, media esfera.
A continuación podemos ver la basílica de Santa Sofía.
Arquitectura Islámica
Los musulmanes fundaron pocas ciudades, se asentaron en las ya existentes, pero las marcaron con su impronta construyendo mezquitas y potenciando el centro comercial o zoco.
La mezquita es el edificio musulmán de culto (el culto islámico consiste en la oración, siendo especialmente importante la de los viernes.
Arquitectura Gótica
La característica más destacada de la arquitectura gótica es su verticalidad y ligereza.
Sus elementos distintivos son el arco apuntado (u ojival) y la bóveda de crucería.
Arco Apuntado
Bóveda de Crucería
El Barroco
En el templo barroco se mantienen las plantas basilicales, pero predominan las centrales, cada vez más complejas: plantas circulares, elípticas, octogonales y de cruz griega.
San Lorenzo del Escorial
Arquitectura Neoclásica
El neoclasicismo se desarrolla a partir de mediados del siglo XVIII y dura hasta principios del XIX.
Es un estilo muy vinculado a la filosofía de las Luces y al desarrollo de la arqueología.
Podemos ver el Museo del Prado en Madrid.
La Arquitectura del Hierro y los nuevos materiales
A finales del siglo XVIII se utiliza en algunas construcciones el hierro colado, que se obtiene por fusión.
El puente de Coalbrookdale, es la primera gran obra de hierro, hecha entre 1775 y 1779.
Aquí lo podemos ver:
La obra más conocida de la construcción mecánica de acero fue la Torre Eiffel.
El Modernismo
Representa la transición de la arquitectura decimonónica a la arquitectura del S. XX.
Su denominación implica la idea de innovación, novedad y proyección de futuro.
Antoni Gaudí, siendo modernista y el arquitecto más importante del momento, no se ciñe por entero a los rasgos generales del modernismo, y ello es debido a su originalidad.
El modernismo es un estilo estético típicamente urbano.
Busca unas formas más refinadas que las ofrecidas por la producción industrial, compaginando funcionalidad y belleza en un intento de crear una ciudad agradable, elegante, moderna y alegre
La Arquitectura del siglo XX y XXI
Está dominada por el funcionalismo de la Arquitectura actual.
El panorama del último decenio del siglo XX y XXI resulta atractivo, no tanto por la existencia de un programa o de unas tendencias generalizadas, sino por la obra, a veces colosal, de algunos arquitectos.
Hay figuras que pueden definir el final de este siglo: el canadiense Frank Ghery, el español Rafael Moneo y el ingeniero, también español, Santiago Calatrava.
El museo Guggenheim de Bilbao de Frank Ghery combina sabiamente unos espacios internos subyugantes con la explosión violenta del metal y de las superficies abombadas en el exterior. Ha sido definido, de manera acertada, como «una tormenta de titanio en la orilla de la ría de Bilbao».
Rafael Moneo: Su arquitectura se puede clasificar de cordial, por la flexibilidad con la que se adecúa al entorno. Utiliza con parquedad los materiales a los cuales dota de una gran nobleza.
Aquí podemos ver el museo de Mérida en España:
Santiago Calatrava: Es uno de los pocos ingenieros que son conscientes de que la materia con la que trabajan puede modelar una obra de art.
Impregnado de un cierto postmodernismo transmite a sus obras la sorpresa y la fascinación propias del movimiento.
Un ejemplo es la Estación de León: